¡Ya está aquí el Espíritu de la Navidad!

El Espíritu de la Navidad, ese Gran Espíritu, que es la conciencia colectiva de todos los seres de Luz, los Seres Ascendidos, Ángeles, Maestros y Ejércitos cósmicos del Señor y vienen a anunciar el nacimiento de Cristo en la hora más oscura del año.

Es el ser espiritual detrás del personaje de Santa Claus, Papá Noel, San Nicolás, ... éste ser cósmico llena nuestros corazones con la anticipación del mayor de todos los regalos, el don del Cristo interno. Él está en el corazón de todos los regalos, y colma nuestro corazón de amor.

Con el solsticio de invierno, llega el espíritu de Navidad, momento para invocar al Gran Espíritu, al ser Crístico para que nos irradie y nos llene de Luz y Amor, de alegría, de gozo, de deseos de compartir, de disfrutar, de celebrar que nuestra energía está siendo renovada.

Pidamos ser más generosos, dar mas afecto, regalar y regalarnos, compartir con alegría nuestro ser.

Tener un corazón generoso tiene muy poco que ver con la cantidad de dinero que gastamos en regalos, está en dar compasión a quién se está haciendo daño, dar el regalo del tiempo para quien necesite ser escuchado, perdonar a quién nos ha dañado, aunque sea complicado o difícil, se puede dar, dar ánimos a quien se siente frustrado o desanimado, dar un lugar en la mesa y compartir una comida, ... y la lista podría continuar.

Éste regalo energético de renovación empieza el 21 de diciembre y termina el 24 de diciembre a las 12 de la noche, con el nacimiento de Jesús.

En el espíritu de la Navidad estamos todos, pues todos somos Uno.

En este día especial, de alta vibración energética y magnética, planifiquemos el mañana y rompamos con el pasado para incrementar nuestra libertad interna. Pidamos por el cambio, el cambio en la Luz para el planeta, para nuestra ciudad, para el sistema de valores, el sistema financiero, el cambio en las circunstancias de nuestra familia, nuestros amigos, ... y en nosotros mismos.

Padre Celestial,

Te pido que me muestres cómo acceder a tu gracia en las situaciones que me rodean actualmente. Ayúdame a ver las oportunidades que proporciona ser generoso con la bondad, el perdón, la compasión, con una respuesta amable, con un oído que escucha o el momento de ser justos con alguien.

No puedo hacer esto por mi cuenta. En el día de hoy, aquí y ahora, pido al Espíritu de la Navidad que me llene con su Gran Espíritu.

Gracias porque Tú eres mi fuente y me das lo que necesito para compartirlo con otras personas.

Padre, ayúdame hoy a ver mi medio ambiente como debe estar bajo tu gracia. Me ayudas en la gracia de dar por el poder del Gran Espíritu.

Que el el Gran Espíritu de la Navidad esté presente en mí todo el año.

En nombre de Jesús. Amén.

En nombre de mi Amada y Todopoderosa Presencia YO SOY, doy la bienvenida al Santo Espíritu de la Navidad, quien baja a este planeta con la misión de DAR. Te saludo, te amo, te reconozco y te bendigo; te doy las gracias por la maravillosa labor de Amor, Alegría y Paz que realizas.

Abro las puertas de mi corazón y de mi hogar a tu radiación, y te reconozco como huésped privilegiado al festejo. Demando, acepto, recibo y realizo una abundante provisión para mí, para mi familia, mis amigos y para toda la humanidad (pide salud, felicidad, prosperidad, abundancia, desarrollo espiritual y las cosas materiales que desees).

Invoco la Ley del Perdón, la Llama Violeta Transmutadora y la Llama Rosa de Amor Divino, para disolver con amor todo lo inarmonioso durante estas navidades en mi hogar y en el planeta. Luz a la tierra, de manera que la Paz, el Equilibrio, el Bienestar y la Alegría llene mi vida y el mundo entero.

YO SOY la Fe que mueve montañas. YO SOY la Esperanza de Dar y Recibir en grande. Realizo la grandeza de la Magna Presencia y la Prosperidad que viene a otorgar la natividad. Borro en mi mente, con luz violeta, todo concepto de limitación y escasez, y no lo acepto más.

Que el fuego sagrado de la transmutación limpie y purifique la Tierra durante estas navidades, para que el Espíritu de la Navidad se encuentre bien en el tiempo que nos visita, y pueda cumplir su labor sin interferencias. YO SOY la transmutación de la llama violeta en acción, y la perfección del Amado Maestro de la Natividad se manifiesta en el planeta entero por el poder del Amor Divino (permanece unos instantes en silencio y visualiza la tierra envuelta en una luz violeta y rosada, después de dar las gracias).

No he podido incluir el vídeo de la canción de Los Planetas: El Espíritu de la Navidad, pero aquí lo podéis ver, bajo la letra.

En los dólmenes más grandes

que existen y que están cerca de aquí,

hay presencias misteriosas,

habitantes de otro tiempo, 

que esperan para dirigirse a ti, 

revelarte los secretos.

Por la noche hay una fiesta 

privada en el jardín,

han venido los monjes Shaolin

con la pócima sagrada 

que te hace sonreír.

Si te vienes es donde quiero ir.

En las copas y en las mesas

refrescos bendecidos por Alá

y manjares deliciosos.

Los espíritus del bosque

que van a descubrirte la verdad,

lo que estabas esperando.

Además de todo esto,

te puedes encontrar

a valkirias que van a disfrutar, 

en los brazos del primero

que se atreva a cruzar 

los umbrales de esta nueva realidad.

A la hora de la siesta,

un coro de sirenas cantará

con sitares y trompetas

las canciones más bonitas

que nadie haya podido escuchar 

en los últimos milenios.

Y después cuando anochezca, 

si esperas al final, 

voy a darte un beso de verdad,

donde acaba el arco iris

y empieza lo demás.

Si te vienes es donde quiero estar.

Donde empieza el infinito y acaba la espiral,

si te vienes es donde quiero estar.