Empezar a hablar sobre ángeles me alegra, por ellos, porque me alegran.
Ha querido estar en esta primera entrada: El Ángel de la Misericordia.
Podemos aceptar el don de la misericordia siendo tiernos y afectuosos con nosotros mismos y con los demás. Entrar en el sendero de la aceptación como un don del amor incondicional. La misericordia nos transporta en los tiempos difíciles de nuestras vidas hasta nuevos niveles de consciencia en los que vivimos más plenamente a la luz del amor Divino, Universal.
Pertenece al Cielo de la Creación, segundo nivel de los reinos celestiales, en el que se rigen los asuntos y relaciones humanas con Pensamientos y Actitudes. Cómo nombre específico se conoce como Dominación.
Cómo no se puede empezar la casa por el tejado, en esta primera entrada no quiero atiborrar de mas información, la desarrollaré poco a poco, para que pueda ser recibida de manera suave.
Antecedentes.Estudié hasta los 14 años en 2 colegios religiosos, hasta los nueve años en una orden perteneciente a las Escolapias, y después en Franciscanas. Lo comento porque desde pequeña ha sido natural para mí ir colegio y rezar y saber vidas de santos y saber sobre ángeles y querer ser misionera, … no así en mi casa que, aunque se era católico, no apostólico y romano, es decir mis padres no asistían a misa ni pertenecían a ningún grupo religioso, incluso mi hermano fue siempre a un colegio privado laico, que según mi padre: las monjas para la niña eran buenas pero para el niño, los curas no! No le gustaban.
Por esa “doble educación” o versatilidad y por mi afán de encontrar respuestas y siendo gran curiosa, tanto he leído de religión (religiones) como de ciencia, de filosofía como de arte. Como buena hija de mis padres, nunca me he encerrado a buscar una verdad absoluta. En casa siempre tenía muy cerca de mí tanto música, como pintura o letras. Y si eres un poco inquieta y sientes un afán por saber, estudias, por ejemplo la música, desde muchas perspectivas diferentes, matemática, auditiva, colorista, sensitiva, armónica, histórica…
Con todo lo anterior quiero decir que soy una persona que intenta integrar las diferentes partes del ser de manera natural, ¿porque no puedo, por ejemplo, ser políticamente de izquierdas y tener fe? Sí a así lo siento así soy. Me gusta contemplar, evaluar y comprender mi entorno, como supongo que a todos, por eso cuando los ángeles me “secuestraron” fue “de fuera para dentro”, no un hecho buscado por mi curiosidad de experiencia o de saber “acerca de”.
Buscando en una librería información sobre restauración de pinturas encontré un precioso libro sobre el tema que me hizo abrirlo y ojear y de repente cae a mis pies un librito, “Ángeles”, y sonreí, lo abrí y ya no pude dejar de leerlo hasta que lo terminé, lo que duró alrededor de 30 minutos, lo aboné en caja, salimos (iba con una amiga) de la tienda, ella conducía y yo “secuestrada”, así llegamos a mi casa. Al acabar de leerlo entendí que a partir de ahí las cosas para mí ya no serían las mismas. Y así fue. Era marzo de 1996.
Ha querido estar en esta primera entrada: El Ángel de la Misericordia.
Podemos aceptar el don de la misericordia siendo tiernos y afectuosos con nosotros mismos y con los demás. Entrar en el sendero de la aceptación como un don del amor incondicional. La misericordia nos transporta en los tiempos difíciles de nuestras vidas hasta nuevos niveles de consciencia en los que vivimos más plenamente a la luz del amor Divino, Universal.
Pertenece al Cielo de la Creación, segundo nivel de los reinos celestiales, en el que se rigen los asuntos y relaciones humanas con Pensamientos y Actitudes. Cómo nombre específico se conoce como Dominación.
Cómo no se puede empezar la casa por el tejado, en esta primera entrada no quiero atiborrar de mas información, la desarrollaré poco a poco, para que pueda ser recibida de manera suave.
Antecedentes.Estudié hasta los 14 años en 2 colegios religiosos, hasta los nueve años en una orden perteneciente a las Escolapias, y después en Franciscanas. Lo comento porque desde pequeña ha sido natural para mí ir colegio y rezar y saber vidas de santos y saber sobre ángeles y querer ser misionera, … no así en mi casa que, aunque se era católico, no apostólico y romano, es decir mis padres no asistían a misa ni pertenecían a ningún grupo religioso, incluso mi hermano fue siempre a un colegio privado laico, que según mi padre: las monjas para la niña eran buenas pero para el niño, los curas no! No le gustaban.
Por esa “doble educación” o versatilidad y por mi afán de encontrar respuestas y siendo gran curiosa, tanto he leído de religión (religiones) como de ciencia, de filosofía como de arte. Como buena hija de mis padres, nunca me he encerrado a buscar una verdad absoluta. En casa siempre tenía muy cerca de mí tanto música, como pintura o letras. Y si eres un poco inquieta y sientes un afán por saber, estudias, por ejemplo la música, desde muchas perspectivas diferentes, matemática, auditiva, colorista, sensitiva, armónica, histórica…
Con todo lo anterior quiero decir que soy una persona que intenta integrar las diferentes partes del ser de manera natural, ¿porque no puedo, por ejemplo, ser políticamente de izquierdas y tener fe? Sí a así lo siento así soy. Me gusta contemplar, evaluar y comprender mi entorno, como supongo que a todos, por eso cuando los ángeles me “secuestraron” fue “de fuera para dentro”, no un hecho buscado por mi curiosidad de experiencia o de saber “acerca de”.
Buscando en una librería información sobre restauración de pinturas encontré un precioso libro sobre el tema que me hizo abrirlo y ojear y de repente cae a mis pies un librito, “Ángeles”, y sonreí, lo abrí y ya no pude dejar de leerlo hasta que lo terminé, lo que duró alrededor de 30 minutos, lo aboné en caja, salimos (iba con una amiga) de la tienda, ella conducía y yo “secuestrada”, así llegamos a mi casa. Al acabar de leerlo entendí que a partir de ahí las cosas para mí ya no serían las mismas. Y así fue. Era marzo de 1996.
Sirva para la Luz.
(Ilustración de Warren Maddill)
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Nota: Siento añadir verificación de palabra, tema spams.