Había una mujer, ciega, sentada en la calle, con una taza y un pedazo de cartón, escrito con tinta negra que decía:
Un creativo de publicidad que pasaba frente a ella se detuvo y observó unas pocas monedas en la taza.
Sin pedirle permiso tomó el cartel, le dio la vuelta, tomó un marcador negro que él llevaba y escribió otro anuncio.
Volvió a poner el pedazo de cartón sobre los pies de la mujer y se fue.
Por la tarde, el creativo volvió a pasar frente a ella; su taza estaba llena de billetes y monedas.
La mujer reconoció sus pasos y le preguntó si había sido él, el que escribió su cartel y sobre todo, qué había escrito.
El publicista le contestó:
"Nada que no sea tan cierto como tu anuncio, pero con otras palabras".
Sonrió y siguió su camino.
El mensaje decía:
**************
Cambiemos de estrategia cuando no nos sale algo, puede que tegamos mejores resultados.
Nadie puede ser esclavo de su identidad; cuando surge una posibilidad de cambio, hay que cambiar.
Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo... del miedo al cambio.
Si haces lo que siempre has hecho, obtendrás los resultados que siempre has obtenido.
El mundo exige resultados. No les cuentes a otros tus dolores de parto. Muéstrales al niño.
Te deseo un Feliz Día, y ten en mente que todo cambio renueva día a día tu vida.
Nadie puede ser esclavo de su identidad; cuando surge una posibilidad de cambio, hay que cambiar.
Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo... del miedo al cambio.
Si haces lo que siempre has hecho, obtendrás los resultados que siempre has obtenido.
El mundo exige resultados. No les cuentes a otros tus dolores de parto. Muéstrales al niño.
Te deseo un Feliz Día, y ten en mente que todo cambio renueva día a día tu vida.
Enviado por una amiga pero sin autor.
Rectificación:
Gracias a Chiara, que me ha informado que éste relato en realidad proviene de un corto, que después fué plagiado y presentado en el festival de Cannes, en el que ganó. Lo dos cortos los podreís encontrar aquí.
17 comentarios:
Me ha encantado leerte. Y aprender. Se aprende cada día. ¡Qué gran verdad¡ Los cambios siempre traen cosas nuevas, no hay que tenerlos miedo. Es conveniente cambiar y no es necesario dar pistas. Basta mostrarlo luego, como bien señala esta historia. Gracias, Edda, buena semana
25 mayo, 2009 13:13Desde luego el cómo se dicen las cosas influye mucho en cómo lo perciben los demás...
25 mayo, 2009 13:47Buena historia.
Gracias Froilán pero la que aprende aquí, o por lo menos lo intenta, soy yo de vosotros, tú sabes lo bien que lo paso leyendo vuestros post y sus comentarios!Uah! pero a veces no dispongo de mucho tiempo y prefiero leeros, votaros (siempre jeje) pero ya no llego a comentar.
25 mayo, 2009 17:10Lo del miedo es normal, nos pone en alerta, pero no debería pararnos ya que el cambio, aunque nos cueste, es lo normal en la vida.
Gracias por el deseo para la semana, me hace falta.
Besets.
Juanjo, siento defraudarte, te cuento, he comprobado que no hace mucho por bitacoras ya se han realizado post sobre el tema de "La Calzada de los Gigantes", con imágenes preciosas, y la verdad, no quiero redundar.
25 mayo, 2009 17:15Continuaré con la Mitología Escandinava que creo que también te gusto.
Besets.
Ok. Tú siempre nos deleitas, da igual con qué sea...
25 mayo, 2009 17:53Un abrazo.
El cuento será de otro; pero el comentario es tuyo.
25 mayo, 2009 21:44Ciego está el que no quiere probar a cambiar de bastón cuando con el viejo comprueba que cae y se golpea una y otra vez.
Ahora bien, un publicista ángel como el que propone el relato no es que se prodigue mucho.
HOlaaaaaaa.. que razón tienes... Un abrazote de lindos sueños
25 mayo, 2009 23:30Ay Juan Carlos, pero a veces somos muy cabezotas!
26 mayo, 2009 08:36Como dice la amiga que me lo envió: "¡eso es un comercial!".
Gracias por tus palabras y por venir a visitarme.
Besets.
Gracias Balovega. Es un placer que pases, ya lo sabes.
26 mayo, 2009 08:40Besets.
Los cambios siempre hay que contemplarlos y hacerlos siempre convencidos, porque un cambio siempre te puede ayudar a ser mejor o feliz, no siempre salen bien, pero merece la pena adaptarse a las circunstancias con la mejor de nuestras sonrisas (aunque muchas veces sea imposible).
26 mayo, 2009 18:16Un beso
Si Pharpe las cosas siempre no salen bien pero siempre hay caminos que pueden ayudarte a aceptar y a veces, no siempre, contamos con el factor tiempo, que según en que situaciones, ayuda un poco.
26 mayo, 2009 20:14Gracias por pasar.
Besets.
Perdón por los "siempres" Pharpe, me he excedido, jaja, si es que no se puede estar en 3 cosas a la vez! Bueno yo no. :-D.
26 mayo, 2009 20:39No te preocupes ;)
27 mayo, 2009 12:34Cuánta verdad encierra este relato. En realidad no necesitamos ser publicistas para lograr cambiar la concepción sobre nuestras vidas.
28 mayo, 2009 00:11Besos, Edda.
Qué bueno...
28 mayo, 2009 15:08Claro que no Rudy, y si tenemos una pequeña ayudita mejor.
28 mayo, 2009 22:48Besotes.
Gracias Bomarzo por visitarme.
28 mayo, 2009 22:49Besets.
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Gracias por tus palabras, siempre son bienvenidas.
Recibe mi abrazo más luminoso.
Nota: Siento añadir verificación de palabra, tema spams.