Cielo de la Forma. Príncipes Angelicales o Principados

Los ángeles que dominan el  Cielo de la Forma son: los  Arcángeles,  Ángeles Guardianes  Personales y Príncipes Angélicos o Principados. Anteriormente ya se han tratado los Arcángeles y los Ángeles Guardianes, ahora vamos a conocer a los Príncipes Angélicos.

Los Príncipes Angélicos son los protectores, ayudantes y guías de las razas, naciones y ciudades. En la Biblia se dice de ellos que tenían una fuerte y poderosa influencia sobre el destino de grandes masas de gente.

Representan el espíritu colectivo de diferentes tipos de humanidad y su presencia combinada equivale al espíritu de un lugar.

Los Príncipes Angélicos ayudan a la humanidad otorgando bendiciones y guía siempre que esté implicado el bienestar de las naciones. Estos espíritus están para ayudar a la humanidad a resolver esos asuntos fundamentales que influencian el destino de las multitudes. Tratan de relacionar las decisiones de los gobernantes con los conceptos universales de verdad y justicia.

Siguiendo la línea de A. Wauters, los Príncipes Angélicos se utilizan para representar las cuatro direcciones de la brújula, los cuatro elementos de la naturaleza y las cuatro funciones psicológicas que componen la mente consciente: pensamiento, sentimiento, sensación e intuición. Así se relacionan con cada uno de nosotros y con nuestras vidas.

Se centran en los aspectos psicológicos de nuestro mundo y pueden ayudarnos a comprender la esencia de las situaciones en las que nos vamos encontrando a lo largo del camino.


Son: Príncipe Angélico del Sur, Príncipe Angélico del Norte, Príncipe Angélico del Este y Príncipe Angélico del Oeste.

Oración de petición de los Principados o Príncipes Angélicos

Te pedimos, Santos Principados, por los que gobiernan las naciones, para que, en espíritu de servicio al bien común, promuevan la Paz entre los pueblos y garanticen a los hombres es respeto y el cumplimiento de los derechos humanos. Ahora y siempre por vuestra Divina Voluntad.

Señor, aumenta en nosotros la fe en la oración hecha en nombre de Cristo tu Hijo, y que por la intercesión de sus santos Ángeles, escuches nuestras plegarias. Amén. Amén. Amén.




Sirva para la Luz.