Un día como cualquier otro

... Así después de esperar tanto, un día, como cualquier otro, decidí triunfar.

Decidí no esperar a las oportunidades sino buscarlas yo misma.

Decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución.

Decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis.

Decidí ver cada día, como una nueva oportunidad de ser feliz.

Aquel día descubrí que mi único rival no eran mas que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarme.

Aquel día dejé de temer perder y empecé a no temer ganar.

Descubrí que no era yo la mejor, y quizás nunca lo fui, pero me dejó de importar quién gana o quien pierde.

Ahora me importa, simplemente, saberme mejor que ayer.

Aprendí que lo importante no es llegar a la cima, sino jamás dejar de avanzar hacía ella.

Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho a llamar a alguien "AMIGO".

Descubrí que el Amor es mas que un simple estado de enamoramiento: ¡EL AMOR ES UNA

FILOSOFÍA DE LA VIDA!

Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia luz de éste presente.

Aprendí que de nada sirve ser luz, si no vas a iluminar el camino de los demás.

Aquel día, decidí cambiar tantas cosas ... aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad.

Desde aquel día ya no me duermo para descansar, también duermo para soñar.

El Éxito en la vida es ... ¡¡¡ SER FELIZ !!! ... El resto es consecuencia.

Gracias a Blanca, del blog Creando imaginación, donde encontraréis preciosas creaciones realizadas con una desbordante y alegre energía.